Hoy quiero hablar de uno de los medios más poderosos , más rentable y por muchos el más odiados del mundo: el correo electrónico y explicarles por qué debemos aprender a cultivarlo y a utilizarlo con respeto si queremos tener un gran negocio en la era digital.
El correo electrónico nace con el símbolo de la arroba en los años 70 y a lo largo de estos cuarenta años se ha convertido en la aplicación más importante en la historia del Internet.
Hoy mandamos más de mil millones de correos electrónicos al día. Y se estima que en los próximos cinco años más de tres mil millones de personas se conectarán a Internet por primera vez y que su dirección de correo electrónico será su llave de entrada al mundo de las redes sociales y a los servicios digitales.
Sin duda, en el ámbito de la comunicación personal las aplicaciones de mensajería instantánea tipo WhatsApp y las redes sociales como Facebook y Twitter han venido a ofrecer nuevas herramientas de interacción muy ricas y amigables. Sin embargo, en el ámbito de los negocios, por lo menos durante los próximos años, el correo electrónico es y seguirá siendo el medio de comunicación más poderoso y rentable del mundo.
Aquí quiero hacer una precisión muy importante. Todas las plataformas de comunicación que tanto nos gustan como WhatsApp de Facebook, Tweets de Twitter, Skype de Microsoft y YouTube de Google, son aplicaciones privadas que cambian regularmente sus términos de uso. Son maravillosas. Pero en el fondo no nos pertenecen. Son el negocio de un tercero que puede tomar decisiones sobre su uso que no nos favorezcan.
El correo electrónico es diferente. Es el medio de comunicación más extendido del mundo y al igual que Internet, es una aplicación abierta que no pertenece a una determinada empresa.
Como empresarios esta es una distinción muy importante. Tú y yo tenemos que cuidar nuestro negocio y por lo tanto es vital que independientemente de lo que pase con las otras plataformas, siempre tengamos, desarrollemos y controlemos nuestro propio medio de comunicación al mundo. Esto es, nuestra base de datos que distribuimos a través del correo electrónico.
Si queremos ser exitosos en el nuevo ámbito de los negocios digitales, hay que aprender a usar el correo electrónico con maestría y respeto. Nuestra base de datos de clientes, prospectos y seguidores es el activo más importante del negocio. Es lo que le da vida, sustento y viabilidad.
Es importante ver a las redes sociales y a Internet en general como nuestra ventana al mundo de las oportunidades. Es un lugar fascinante, lleno de gente maravillosa para conocer y entablar amistad. Pero el verdadero negocio no está ahí. El gran negocio está en nuestro sitio web. Por lo tanto todo lo que hagamos en el mundo digital necesita referirse una y otra vez a nuestro sitio web y a la creación de nuestra base de datos.
Fans, seguidores y likes son números que demuestran nuestro nivel de popularidad en las redes sociales. Sin embargo, no hay que olvidar que los números de popularidad son simplemente vanidad y que lo que realmente cuenta son las ventas y la utilidad. Por lo tanto la verdadera medida del éxito no son los likes, los fans y los seguidores sino el número de personas que nos dan su correo electrónico para permitirnos comunicarnos uno a uno con ellos.
Y es precisamente en el momento que una persona nos confía su correo electrónico que surge la magia. Ahora si contamos con el medio y el permiso para entablar un diálogo mucho más rico, profundo y duradero con él o con ella. Ahora si estamos en la posición de poder realizar campañas de venta mucho más lógicas y rentables, brindando el mensaje correcto, a la persona correcta, en la secuencia correcta, en el momento preciso.
En resumen.
El correo electrónico es y seguirá siendo el medio de comunicación comercial más poderoso del mundo. Conquista la era digital. Construye una gran base de datos y úsala con inteligencia, respeto y oportunidad.
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